11 de junio de 1919.
3 de abril de 1998.
Peso: Pluma.
“Una paliza de Demetrio Sampson, lo hizo púgil. Comenzó en 1940 y fue campeón de Tarapacá, al vencer a Demetrio. En 1944, campeón de chileno. En Montevideo, derrotó al argentino Raúl Angerami, campeón sudamericano. Jamás eludió una pelea. Es pintor profesional” (La Estrella de Iquique, Suplemento Deportivo, 9 de julio de 1970).
Tiene la humildad de los campeones. La humildad de aquellos que saben que ocupan un lugar en la historia del deporte local y nacional. Nació el 11 de junio de 1919. Fue campeón de Chile, por los livianos el año 1944. Y disputó el título nada menos que con Oscar Francino el otro gran boxeador iquiqueño, que en ese entonces iba peleando por la Aviación. Ese mismo año, el 1944, fue campeón latinoamericano en Uruguay.
Bernardo León peleó por aquel centro de box que ya no existe: El Tani. El, precisamente hizo las últimas peleas en ese club. León nació en El Colorado, precisamente en Bellavista Estación con Videla. El mismísimo Tani Loayza, dirigía sus entrenamientos. Dice León que el Tani, para animar a sus dirigidos los arengaba: «Combo y combo, si te pegan, inmediatamente pon el otro combo». Cuando peleaban en Santiago el Tani les decía: «Dale fuerte, no olvides la hazaña de Prat. Dale, que en Iquique te están escuchando por radio». El Tani daba ánimos como ninguno.
León fue un estilista, de gran movilidad sobre el ring. El Tarapacá dijo de él que «era elegante, pero apático púgil». Sin embargo, conversando con él, se observa un hombre sumamente simpático. Peleaba agachado. Eso le valió que le apodaran «El Godoy chico» por su parecido con el gran Arturo Godoy. El año 44 cuando pelea con Oscar Francino, tras éste, dirigiéndolo estaba el Tani, y tras León, Arturo Godoy.
Otra pelea que recuerda León con orgullo, fue aquella que hizo frente a ese otro boxeador iquiqueño Guillermo Vicuña. El Tani preparó a León. Vicuña peleaba con un pie adelante, y echaba levemente el cuerpo hacia atrás y de ahí sacaba sus golpes. El Tani le digo entonces a León: «Si le vas a boxear a Vicuña estás perdido. Ese sabe la Biblia del box». Entonces le aconsejó ir siempre encima de él. De ese modo, León no lo dejó boxear y lo ganó.
Bernardo León vive justo al lado de Roberto “Mono” Sola. En su casa, en una viga, aún está el gancho, desde donde colgaba la pera donde practicaba el box con el arquero iquiqueño. Ambos se encontraban en Santiago, cada vez que salían campeones. Dice León que Sola era tan ágil que caminaban por las calles, y sin decir agua va, se daba vueltas en el aire y seguía caminando como si nada. Se encontraron varias veces en las celebraciones que en la capital organizaba para los iquiqueños Santiago Polanco Nuño, el autor del himno de Iquique, entre otros tantos himnos.
Tuvo cuatro hijos: Manuel, Bernarda, Gloria y Ariel. Su esposa fue Digna Rodríguez Scopinich.