Se veía venir. Era cuestión de tiempo. Después de todo, el pasado y la memoria incomodan. Todos desean superar el pasado para de este modo conquistar el futuro. Ignoran que pasado, presente y futuro constituyen una cadena. No se pueden soltar amarras con lo que nos define, esto es la memoria y las acciones que nuestros antepasados construyeron.

El mal llamado «Gigante de Atacama», ha sido, al igual que en la conquista española, saqueado y violentado en su sacralidad. Y no sólo por ese vehículo que transitó por esa piel de piedra y arena, sino con la indiferencia con lo que lo hemos tratado. Esa inmensa figura, que representa la presencia de la cultura andina en Tarapacá, parece molestar a quienes creen que somos lo que somos, gracias al 21 de mayo de 1879.

La batalla de hoy es la batalla de la memoria. Consiste en clavar estacas de lo que fuimos, para saber de donde provenimos y hacia donde vamos. La lucha por el patrimonio, su defensa y su activación es una tarea política. Y lo es en cuanto nos sitúa en coordenadas de tiempo y espacio. Nos remite a una tradición, a una memoria larga.  Larga porque nos habla de una mitología que señala el paso de Wiracocha civilizando nuestro espacio, según las notas de algunos cronistas. No hay una sola verdad.

De las tantas asignaturas pendientes que tenemos como chilenos, destacan dos que están intrínsicamente ligadas entre si: la del patrimonio y la de los derechos humanos. El puente entre ambos radica en la dignidad del ser humano. El cerro Unita y Pisagua constituyen los dos ejes de lo anteriormente mencionado. Y sobre ambos temas gozamos de una increíble ignorancia. En nuestro portalwww.tarapacaenelmundo.com hemos advertido sobre esta situación. Los derechos humanos no pueden ser considerados si no se le entiende como patrimonio.

Tunupa hoy y mañana quien que sabe que, es una alerta sobre nuestro desinterés por la memoria de quienes nos enseñan como vivir en esta región. La educación patrimonial es el mejor resguardo de nuestras bellezas, no los muros ni nada que se le parezca.

Publicado en La Estrella de Iquique, el 20 de enero de 2019, página 13