Nada más solemne y protocolar que ver caminando por nuestras calles a dos vecinas tomadas del gancho. Es la expresión de la ayuda mutua. Mirando el cerro, sintiendo la mar -como dicen los pescadores- recordando las veredas de madera o los paseos en la plaza Prat, en la que tal vez conocieron a quien aún lo acompaña. Andar tomada del gancho es un acto supremo de confianza.

Las calles de hoy echan de menos esos brazos entrelazados. Monopolio de las vecinas de nombres antiguos y en español. Andar enganchadas es el mejor homenaje a la amistad.

Gancho tiene muchos otros usos. Al buen amigo se le dice es mi gancho. Algunos te hacían gancho, es decir los necesarios trámites para conocer a la dama. El que iba y venía con recados.

Las grúas del puerto tenían unos inmensos ganchos. Enormes cajas albergando, no se qué mercancías, eran bajadas al puerto abriendo el apetito de aquellos estibadores marítimos y de sus medios pollos. Cuando se une la isla Serrano a la ciudad – años 30- aparecen las primeras grúas. Hombres como Mateo Fistonic trabaja levantando piedras en punta Negra. Una obra de gran envergadura que hemos olvidado. En el libro La Reseña de Tarapacá de Alfaro y Bustos se destaca esa épica.

En el deporte se usaba también. Los puños del Tani o Godoy, entre tantos otros, como Carlos Rendich o Humberto Loayza eran famosos por los clinche. Gancho es la traducción de clinch. El guapo de Caleta Buena, los usó con frecuencia.  En el baloncesto convertir un gancho, eran palabras mayores. Se me viene a la memoria  un alero del Chung Hwa, Aurelio Chung…certero y paciente como buen oriental. Deben haber muchas mujeres y hombres que dominaban esa técnica.

Nuestra infancia más basada en el ingenio que en la tecnología,  imitaba en base a pura creatividad, esas inmensas grúas con sus ganchos,  con tarros de leche. La lata de esos tarros tenía otros usos. Los caballeros usaban gomina y las señoras de ese entonces andaban enganchadas. Era otra ciudad y todos éramos lindos.

Publicado en La Estrella de  Iquique el 11 de agosto de 2024