Alex Rely FOTO

 

Cada sociedad para ahuyentar sus males, o explicarlos, elabora respuestas simples y violentas, a la vez. En las sociedades llamadas tradicionales, se cargaba a un chivo con todo el equipaje y simbolismo que según esas personas, representaban sus males. E internaban a ese animal al bosque. Ese ritual significaba que los males se iban a lomo de ese cabrito. De ahí la expresión chivo expiatorio.

Cada sociedad elabora sus propias respuestas a sus temores y utiliza sus singulares chivos expiatorios. La quema de Judas, por ejemplo, es la aniquilación a través del fuego del traidor. Judas sobrevive a través de personajes contemporáneos. Hoy, ese lugar lo ocupan los extranjeros, pero fieles a nuestro racismo, son extranjeros morenos, chinos, indios o afro-descendientes. En ellos simbolizamos nuestros pesares, nuestras angustias. Ellos son los «responsables» de nuestras desdichas. Ellos cargan el estigma de nuestras desigualdades.

En otras palabras creemos que los extranjeros, nuestros vecinos, son los causantes de nuestros males. La comunicación social local, sobre todo radial, anima esas construcciones simbólicas. “Nos vienen a quitar el trabajo”, expresan molestos. Pero ya lo sabemos ese no es el problema. El tema está en que la desigualdad abismante en nuestra sociedad, hace que la estructura de las oportunidades sea cada vez menos atractiva. Que estamos en crisis económica, lo estamos. Y lo anterior acentúa más nuestra aversión hacia quienes, equivocadamente creemos nos viene a robar el pan.

Al igual que a comienzos del siglo XX, los iquiqueños levantamos las banderas del racismo. Fueron los chinos, los peruanos y bolivianos que en época del salitre fueron presa de la xenofobia. Orgullosos proclamamos nuestra multiculturalidad, pero nos cuesta asumir que es. Ojalá sea cuestión de tiempo. La escuela y el barrio deben jugar un rol fundamental en la integración, no en la asimilación, de los futuros iquiqueños. Me alegra mucho que en la senda de los Corvachos, de los Chia y de los Quispe, tengamos la piel diversa, y los ojos centrados en la querencia por nuestro territorio. Como el título de un viejo libro en “Tarapacá caben todos los horizontes”.

Publicado en La Estrella de Iquique, el 22 de mayo de 2016, página 15

En la foto Alex Rely boxeador. Discriminado por afro-descendiente y peruano en los años 20 del siglo pasado, en Iquique.