Lo conocí en esa tienda de música donde se vendían vinilos y cassettes. En las esquinas de Latorre con Vivar. Un amplio espacio tan amplio como la sonrisa y la bondad de su dueño. Siempre elegante como eran los iquiqueños de antes: bien afeitado, bien peinado, paltó y zapatos lustrados.  Compré un LP que se llamaba «Jairo canta a Borges» una joyita que escucho al escribir esta columna.

El personaje en cuestión se me revelaría tiempo después cuando supe, tal vez por Mario Cruz, que era el ideólogo de Los Bingos, un grupo musical que compuso la cumbia al Chapulín Colorado, entre otras canciones. Para entonces la tienda cerró y se me perdió de vista aquel señor.

Nuestra identidad y patrimonio se construye también a través de la  música popular. Investigando, Los Bingos aparecen de nuevo. Preguntando llegué a cuenta que el señor que vendía esas joyas musicales era el arquitecto del grupo. Guido Marinkovic Jofré, sus señas.  Hablábamos cada vez que podíamos y seguro que lo molesté con tantas preguntas. Nunca perdió la paciencia y me trataba, y es lo que soy, como un aprendiz de muchas cosas.  En la rica y variada  historia de nuestra música popular, Los Bingos ocupan un lugar de privilegio. Junto a Mario Berríos se nos ocurrió grabar el CD Las Canciones del Chumbeque a la Zofri, un derivado del libro, tal como lo fue la obra de teatro y las danzas del Kirky Wayra. Le entregamos una canción para que la grabaran. Pero, en esas reuniones de la calle Manuel Rodríguez, ritual de Los Bingos, decidieron componer una canción especial. Una noche de invierno en  Correo y Telégrafos, repleto de nostalgias, interpretaron un bolero que resume al Iquique de hoy. Palabras como corazón, tiempo señorial, catedral,  gloria, pocos iquiqueños van quedando ya, Iquique es puerto, constituyen sus ejes.

La nostalgia en la primera voz. Un lamento iquiqueño en son de protesta frente a tantos cambios. Mientras escribo, escucho ese bolero desgarrador. El domingo lo despedimos, sonó la canción y lo despedimos con un aplauso cerrado.

Publicado en La Estrella de Iquique, el 2 de febrero de 2020, pagina 13