Las ciudades pueden reconocerse y recordarse por sus tiendas, supermercados, despachos, botillerías, entre otras, así como por sus recintos deportivos, fuentes de soda, etc.
El Iquique de los años sesenta se definía por la existencia de sus tres radios emisoras, todas AM, que este año en Chile, cumple un siglo de transmisiones. Se disputaban el dial, tenían programas deportivos, musicales en vivo como la de la radio El Salitre. Hombres y mujeres que marcaron toda una época. Y aun la marcan como el caso de Raúl Rodríguez -R.R- con su programa “Cita a las 13”. La lista es larga y la podemos cerrar con la voz del tango que ya nos dejó: Alicia Acuña.
Tiempos en que había una sola óptica, la de Pallarés, que daba abasto a una pequeña población con problemas “a la vista”. Dos tiendas deportivas “Sacco Deportes” y “Álvarez y Hermanos”. Igual sucedía con los restaurantes. Montecarlo, Viña del Mar y las parrilladas del Rolo López. No más de tres chaufas. Igual número de farmacias: la Danesa, la Cóndor y la Bristol. Lo mismo sucedía con las peluquerías. Se disfrutaba de un completo en el Diana, donde Ormázabal o en el Yiy. La noche olía a maní tostado y la banda del Litro anunciaba las peleas.
Recorrer la ciudad hoy es encontrarse con una decena de ópticas, una al lado de la otra. Ya no sabemos cuantas radios emisoras caben en el dial, los restaurantes se han multiplicado al igual que las farmacias. Las chifas son incontables. Las peluquerías se han esparcidos y aparecen nuevos estilos traídos por los colombianos. ¿Qué pensaría “Manos de Hacha” o los estilistas de los años 80 como Eloy o Marco? Los carritos con completos se instalan en el centro, y se le agrega el choripán. Naufragó el buque del maní tostado. Ya no hay banda del Litro y menos Casa del Deportista que llevaba el nombre de Guillermo Valenzuela. El Faro apagó sus luces y El Tigre dejó de rugir. Otros locales pueblan nuestros nuevos imaginarios: entre ellos el Mall Chino.
Publicado en La Estrella de Iquique el 25 de septiembre de 2022, página 11.