Los bautizados con el nombre de Patricio, en un acto casi de magia, serán llamados Pato. Y de ahí sus variantes que no son muchas como patito, por ejemplo. Y su uso se prolongará más allá del nombre de esos sujetos que superará al de su muerte. Serán recordados como el Pato León, el Pato Advis, por solo nombrar dos, queridos e inmensos iquiqueños.  A algunos Patricios más que octogenarios le seguiran llamando patito.

Pato como muchas otras expresiones es polisemántica. Refiere a un sinfín de situaciones. Una de ellas, es quedar pato. Denota carecer de un mísero peso en los bolsillos. Sin una chaucha en el bolsillo de perro. En bancarrota, en otras palabras.  Al agua pato, tema de una canción infantil, era usado cuando seguiamos las instrucciones del negro Calinga, y nos metíamos a capear tumbos, siempre tres seguidos, en Cavancha.

Otros sin llamarse Patricio, recibían el apodo de Pato. Ya sea por el modo de caminar o por rasgos faciales. En mi barrio había un Patricio que escapaba de la norma y se le conoció siempre como Paty, basquetbolista y beisbolista. Un buen tipo. Meza su apellido.

Un jugador brasileño llevaba por apellido Pato, nuestro boxeador se apellida Carrión, y el otro Sesnich, lo mismo que el presidente, el primero luego de la dictadura. Sin olvidar al Pato Flores cantautor de la Chinita.

(Hay otros usos y  expresiones, no la escribo, groseras, por cierto).

A los recién nacidos, se les daba agua en pequeñas dosis, se le llamaba pato. Era un objeto casi sagrado que había que hacer hervir a cada rato. Y eso que no había Covid. Un inmenso pato de hule recorrió el país, a título que no se qué.  En la gastronomía china, esta ave es bien apreciada. En la escuela el pato del silabario, nos ayudó a descifrar vocales. Otro artefacto, ayuda de urinario para adultos mayores, se le conoció como pato.  Muchos de quienes lo usan,  en su infancia se habrán bañado en la poza de los Patos.

Fotografía tomada de muro de Jacobo Canaan

Publicado en La Estrella de Iquique el 13 de febrero de 2022, página 11