Dan Petersen llegó a Chile, el año 1971, mejor dicho, a Santiago, vestido al mejor estilo hippie. Era el modo en cómo se vestía la gente por esos tiempos. Tiempos de amor y de paz. La banda sonora de esos jóvenes alcanzó con Woodstock su máxima expresión.

Dan Petersen, el gringo no era hippie en el sentido literal. Venía no como agente de la CIA, como algunos creyeron, sino como entrenador de básquetbol. Venía a emular a otro de su compatriota que sacó a Chile, tercero en el mundial de básquetbol realizado en Argentina, el 1950. En ese equipo una joven promesa anunciaba su brillo, Juan Ostoic. Juan José Gallo y Eduardo Cordero aportaban con su experiencia. Tres iquiqueños con medalla de bronce.  El gringo que realizó esta proeza fue Kenneth Davidson. En Chile la memoria deportiva ha olvidado a los grandes del basquetbol.

Gracias a los consejos de Juan Ostoic, llama a la selección nacional a Manuel Carrasco y a Lorenzo Pardo. Van a una maratónica gira a Estados Unidos.  El gringo queda asombrado con la figura del Lolo Pardo. En un libro que Petersen pública en Europa habla del padre de Fabiola con una admiración increíble.

“Él era perfecto. Nuestro mejor jugador, Edgardo Arismendi, y nuestro Capitán, Manuel Torres, tomaron a Lorenzo bajo sus alas y lo mantuvieron en el buen camino. Mejoró tanto que lo llevé a la gira de 40 juegos por los Estados Unidos. Gritaba: «¡Que no crucen la línea de media cancha!». Ese se convirtió en el grito de guerra de nuestro equipo”.

Dice Petersen “llegué a amarlo, no solo por el jugador que era sino también por el hombre en que se convirtió. No mucho después de que me fui de Chile, en 1973, Lorenzo se casó y tuvo una hija, Fabiola, nacida en 1976, quien brilló en la selección nacional femenina de Chile. Bueno, él fue un ejemplo de una oportunidad que se tomó y el resultado resultó ser el mejor. Era, como se ha dicho, el espíritu impulsor de nuestro equipo de lucha. Todavía puedo escucharlo gritar su desafío: «Que no crucen la línea de media”.

Palabras de Dan Petersen para el gran Lorenzo Pardo.

Publicado en La Estrella de Iquique, el 18 de junio de 2023.