Santiago Mosca fue el primer boxeador iquiqueño que contribuyó a abrir la senda que años más tarde recorrerían el Tani, Arturo Godoy, y tantos otros púgiles locales. Los hermanos Juan y Santiago, y sobre todo el primero, se caracterizaron por su técnica.

Juan Mosca, hermano mayor de Santiago, fue quien sostuvo uno de los primeros combates con Juan Marino. Ambos se enfrentaron en una pelea que constituyó una fiesta.

El encuentro se efectuó en un local ubicado al frente del Cementerio Nº1. Y fue espectacular. Ganó Mosca por K.O., al segundo round. Con estos combates el box adquirió en Iquique mayor popularidad. Hubo evidentes progresos y todos los encuentros se vieron realzados por una enorme concurrencia. Las autoridades, especialmente invitadas, siempre ocupaban el ring-side.

 

Empezó entonces la llegada de numerosos púgiles a esta provincia. Por esos años, 1914, 1915 y 1916, llegó hasta Iquique, Humberto Planet quien sostuvo varios combates “a la chilena”, en un local ubicado donde estuvo la cancha –que ya no existe- del deportivo Cheng Hwa, en la calle Serrano entre Juan Martínez y Amunátegui. Y que a la sazón estaba destinada a realizar corridas de toros.

También estuvo por aquel tiempo Manuel Bastías, quien protagonizó un emotivo encuentro frente al argentino Luis Salcedo. El match se efectuó en el escenario del teatro Nacional, que estaba entonces en la calle Vivar entre Sargento Aldea y Latorre. Bastías ganó el encuentro por punto después de tener a su rival continuamente en la lona.

 

Por aquellos años, no había todavía centros boxísticos que permitieran el incremento de aficionados. Solo unos que otros gimnasios, con los implementos más elementales, permitían a los que llegaban y a algunos iquiqueños prepararse adecuadamente para presentarse en el ring.